Cuando se diseña la estrategia de comunicación interna es necesario alinearla con la cultura corporativa de la organización. Muchas veces, una mirada instrumental de esta especialidad impide la coherencia de la voz corporativa con su público más importante: el interno.
“La comunicación acompaña esta nueva concepción de la empresa donde el hombre es el capital más precioso; la comunicación es el testigo y el agente de un nuevo contrato social. Las empresas que se preocupan por las personas buscan en efecto gestionar los signos que la hacen comunidad y formular la gran historia de su aventura” Pascale Weil
Si bien, este es un tema mucho más profundo y que requiere un repaso científico; sí podemos facilitar esa coherencia (Comunicación / Cultura) teniendo en cuenta estos 4 elementos:
- Lenguaje: Identifica la forma como se comunica tu empresa y su gente. El lenguaje siempre debe ser cercano, claro y ojalá conciso. ¿Cómo habla tu empresa y sus marcas?
Siempre me gusta citar el caso de los medios de información argentinos. No vacilan en usar el “vos” en sus oraciones y tildar sus modismos: “vos sabés”. Caso contrario pasa en Cali, Colombia (Mi ciudad adoptiva). La gente en la calle “vosea”, pero los medios de esta ciudad, en su mayoría, nos tratan de “usted” o de “tú”.

- Línea editorial: La comunicación interna debe tener una fuerte identidad y fomentar la comunidad. Estudia y utiliza el horizonte organizacional de la empresa: objetivos, principios, la cada vez menos usada misión y visión, y valores.
Cada información, noticia, imagen visual o sonora, entrevista, reunión o conversación que generes; debe relacionarse con alguno de estos elementos. Si el contenido o la acción comunicativa no representan ni los principios, ni los valores, ni otro elemento organizacional; no la debes publicar o realizar.

- Credibilidad: Es una obviedad que la información debe ser veraz. Pero para que el círculo de la credibilidad se complete, es necesario que también se comunique o se converse sobre los temas negativos que afectan a la organización.
Si no se tiene la madurez para hablar de lo malo, tampoco se estará preparado para ganarse la credibilidad y confianza de la gente.

- “Omnipresencia”: La comunicación, como la cultura, no solo se vive en los medios informativos. Es necesario interactuar en todo el escenario organizacional.
Para finalizar, identifica todas las dimensiones y espacios donde la comunicación (formal e informal) tiene actividad. Gestiona, además de los medios, las reuniones, los procesos, las conversaciones, los rituales y cada momento de verdad para las personas y la cultura empresarial.

Espero que esta entrada te sea de mucha utilidad. Para ver otros artículos, puedes visitar la página inicial del Blog Función C, Comunicación, Cambio y Cultura, haciendo clic aquí.
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Cultura organizacional y comunicación son dos caras de la misma moneda. No tienen valor una sin la otra. No se improvisa el trabajo sino se lo hace profesionalmente con años de trabajo y formación
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Gracias por el comentario Gabriela. Saludos
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No basta con definir una línea editorial clara o elegir un lenguaje cercano; la clave está en que cada comunicación refleje acciones tangibles. Por ejemplo, si una empresa promueve la innovación como un valor central, pero internamente desalienta las ideas nuevas por temor al error, su comunicación perderá impacto.
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Muchas gracias por tu comentario. Estoy muy de acuerdo. En los últimos post he comentado algo sobre este tema y también desde el liderazgo.
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Me gustaría sumar una perspectiva que considero clave: la coherencia no se decreta, se construye con el ejemplo. Es decir, por más que definamos un lenguaje claro, una línea editorial alineada y una narrativa institucional robusta, si los líderes no encarnan esa cultura en su comunicación cotidiana, la estrategia pierde fuerza. En ese sentido, el liderazgo comunicacional es el eslabón que traduce la cultura en hechos visibles.
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Muchas gracias por sumar este punto de vista. Es real, las el poder de las acciones tienen una carga cultural y comunicacional muy fuerte. Saludos desde Colombia.
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